La vida es un vals.
Un vals que marca tus pasos al compás de los del otro.
Un vals que te desplaza y desparrama,
Un vals que te impulsa a reir y llorar;
a dormir y despertar;
a decidir por donde bailar, y con quien...
Un vals natal, naíf, risueño, inquieto, dramático, empático.
Y en este vals, siempre hay alguien que sostiene tu alma mientras sostiene tu mano,
que muerde la luna, y te entrega la noche un poco mas oscura...
y tenes que cerrar los ojos e invocar un nuevo amanecer,
una nueva oportunidad de volver a empezar,
una nueva promesa que te haces a vos mismo para continuar con este vals inexorablemente libidinal.
1 comentarios:
Muy cierto la vida es un vals, y nosotros le ponemos la melodía.
¿Desea bailar señorita?
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