14.9.09

La lluvia me consuela, me acaricia, me susurra y purifica.
No me siento sola cuando su llanto y el mío fluyen sobre el césped.

2 comentarios:

Jackie Silva dijo...

Hola estimada blogger
Estuve visitando tu Blog y está excelente, permíteme felicitarte.
Sería un gusto contar con tu blog en mi directorio y estoy segura que para mis visitas será de mucho interés.
Si deseas no dudes en escribirme a jackiesilvajauregui@hotmail.com
Exitos con tu blog.
Un beso
Jackie

Anónimo dijo...

Cuando queremos dejar ir algo es mágica esa sensación del agua cuando nos cae encima, nos empapa y nos recorre de la cabeza a los pies, purificandonos... y siguiendo luego su camino, se lleva esa parte de nosotros que no queremos dejar ir.
Su magia ? Su Complicidad... el hacernos comprender que solo dejando ir y fluyendo, es como podemos recuperar nuestro camino e impetu. Ese es su poder.
Saludos !